Existe un muelle al borde de la taza, donde bocas piratas amarran sus labios por instantes, con el solo fin de robar de a traguitos sus mares contenidos.
sábado, 12 de mayo de 2012
Abrigos
Media hora de caramelos,
ese recodo que alardeas tan bien,
un perchero vacio
y nosotros abrigados de ímpetus.
Un barrido de conversaciones,
el arrugar de mi nariz tramposa,
un perchero lleno de ganas
y nosotros desvestidos de calmas.
2 comentarios:
Esos son los abrigos que dan calor, los que se desvisten con calma.
He venido a beberme un traguito de sus palabras. Y me siguen encantando, como antes.
Abrazos
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