
Apuñalare a mi voz hasta vaciarla de palabras y en ese enchastre macabro de silencio la arrastrare hasta la seguridad oscura de callarla y que no te hable.
Asfixiare a mis besos en mi propia boca y en esa desesperada necesidad de escaparse me los tragare enteros hasta digerir la mínima sospecha de que te besen.
Ahorcare la idea de verte hasta cegarme y con la misma soga me coseré los ojos por las dudas todavía exhalen algún deseo de mirarte.
Envenenare mis manos hasta que se sequen de caricias y se retuerzan como arañas al morir, cerrándose duras y en puño para así no tocarte.
Acribillare mi ganas de tenerte, una por una y por la espalda; congelare mi sexo y se lo tirare a los perros de la concupiscencia ,explotare los sueños, quemare el deseo, descuartizare mi memoria y la picare bien finita hasta que desaparezca cualquier vestigio tuyo.
Cada asesinato, premeditadamente organizado; frió, con la alevosía misma de quien verdaderamente se sabe amenazado y en peligro de muerte...
8 comentarios:
Wow...que hermosa manera de matar, sobre todo algo asi como el amor, valla que genial, me encanto...
Somos vulnerables cuando amamos, pero... ¿alguien quiere ser fuerte?
Besos,
qué precioso!
Ufff. Fuerte.
Me gustó mucho.
Un abrazo!
http://queelvertigopare.blogspot.com/2009/11/matame-amor.html
hace un tiempo tuve esa misma necesidad de matar algo para nacer de nuevo
un abrazo genio!
Hermosa manera.
No hay duda.
Ahora con su permiso, quiero pasear por su blog. Tiene muy buena pinta.
Saludos blasianos.
Me temo que resucitará.
Lo siento.
Saludos.
jaja muy pero muy bueno, te quedó genial.
Publicar un comentario